viernes, 27 de noviembre de 2009

SOÑANDO CON EL CIELO




La vieja liebre, el gélido sapo lloran el rostro del cielo
Pabellones de nubes entreabiertos blanquean al sesgo los muros
Ruedas de jade chirrían sobre el rocío, humedecen el círculo de la luz
Pendientes de fénix se encuentran en los peldaños fragantes de casia
Polvo amarillo, agua clara a los pies de las montañas sagradas.
El cambio de mil años se parece al galopar del corcel
Observo desde lejos el reino del centro, nueve mo
tas de polvo
El agua del océano apenas grieta en una copa

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